Con el objetivo de apostar a nacionalizar la campaña en la provincia de Buenos Aires, territorio que concentra el 40% del padrón electoral, la candidata presidencial de Juntos por el Cambio (JxC), Patricia Bullrich, y su aspirante a la Gobernación, Néstor Grindetti, se reunirán este viernes con intendentes mientras esperan sumar a las recorridas a figuras del espacio.
Tras el encuentro entre Grindetti, su rival de la interna Diego Santilli y un grupo de intendentes, ahora Bullrich será la que encabece una cumbre para apuntalar la campaña rumbo a octubre, en la que JxC se juega una parada complicada tras el aluvión de votos a Javier Milei. La reunión del viernes se hará en la localidad bonaerense de Pilar, un distrito actualmente gobernado por Federico Achaval, de Unión por la Patria.
En estas reuniones políticas, que ya comenzaron la semana pasada, se discute la estrategia discursiva de campaña, el despliegue territorial y la fiscalización en cada distrito. Acompañado del diputado provincial y jefe de campaña en la provincia, Adrian Urreli, Grindetti viene manteniendo encuentros con grupos de intendentes, y tuvo el martes reuniones en San Nicolás, San Miguel y hoy continuarán en Almirante Brown.
El lunes, el también presidente de Independiente mantuvo un almuerzo con su adversario en las PASO, Diego Santilli, quien terminó reconociendo su derrota, al tiempo que encabezó una reunión solo con jefes comunales del PRO con el objetivo de alinear a la tropa, ya que la mitad de estos impulsaron la postulación de Horacio Rodríguez Larreta
Santilli se mostró a disposición de la campaña de Bullrich, quien buscará en las próximas horas tomar impulso de la mano del economista Carlos Melconian pero también sumando a las recorridas en la provincia a Rodríguez Larreta, Facundo Manes y María Eugenia Vidal.
La ex ministra de Seguridad ganó la interna y la alianza opositora salió segunda en las PASO con el 28,3%. Sin embargo, en cantidad de votos, quedó en tercer lugar con 4 millones y solo un 17% de los sufragios, tres millones menos que el líder libertario (30%). Se ubicó incluso detrás de Sergio Massa, con un millón de votos menos.