Este sábado marcó el inicio de un espectáculo sin igual en La Plata, con La Renga llevando a cabo el primero de sus dos shows programados en la capital de la provincia de Buenos Aires. Con una asombrosa asistencia de más de 40,000 personas, el Estadio Único Diego Armando Maradona se convirtió en el epicentro de la emoción y la pasión por la música.
El público fue testigo de un espectáculo innovador en términos de sonido y escenografía, con un impresionante escenario 360 grados que sumergió a la multitud en una experiencia única. La energía fue palpable mientras la banda icónica interpretaba sus éxitos, y los fans no pudieron evitar unirse al coro en cada canción.
Con la gira “Totalmente Poseídos” en pleno apogeo, La Renga continúa dejando su huella en la escena musical argentina. Tras sus históricas presentaciones en enero, donde agotaron cuatro estadios en Racing, la banda se despide de “Alejado de la Red”, su último trabajo discográfico.
No te pierdas la próxima oportunidad de ser parte de esta experiencia única. La Renga estará de regreso en el Estadio Único Diego Armando Maradona el 11 de mayo. ¡Prepárate para ser poseído por la música!
Homenaje
Por un lado, a partir del fallecimiento del mítico cantante y baterista Javier Martínez, fundador de Manal, La Renga homenajeó al artista al interpretar la canción “No pibe”
Manal fue un trío precursor argentino del blues y rock cantados en castellano, integrado por Alejandro Medina (bajo, voz y teclados), Claudio Gabis (guitarra, armónica, piano y órgano) y Javier Martínez (batería y voz). Pese a su corta trayectoria, la influencia de Manal fue fundamental y una de las bases del rock argentino.
Chizzo fue el único invitado en aquella legendaria presentación hace 10 años de Manal en Red House, el reducto secreto donde los músicos se juntan a zapar blues y rock y donde hicieron en una incendiaria versión de Doña Laura.
También fue como invitado especial en Vorterix acompañando a la legendaria banda.
La Ciudad
La Plata se convirtió en el epicentro de un gran evento que atrajo a multitudes, generando un impacto económico positivo en la región. Los sectores de hostelería y gastronomía se vieron especialmente beneficiados por el flujo de visitantes. La Plata exhibió su capacidad para albergar eventos de gran envergadura, consolidando su posición como un punto clave en el mapa de eventos multitudinarios.
El éxito del evento resalta la importancia de la colaboración entre el sector público y privado. La coordinación entre ambos sectores fue clave para el logro de resultados positivos. Los ciudadanos y comerciantes se beneficiaron directamente de esta sinergia. La unión de esfuerzos permitió maximizar el impacto del evento en la comunidad.
