El productor del documental Justicia Divina, el cual se grabó de forma secreta y destapó el escándalo durante el juicio por la muerte de Diego Armando Maradona, presentó este jueves un escrito ante los fiscales que investigan a la jueza Julieta Makintach y complicó a la magistrada.
José María Arnal Ponti, presidente de la productora Ladoble SA, explicó que Makintach sabía de la grabación del documental y que costaría 800 mil dólares.
“El proyecto para la realización de un documental del juicio por la muerte de Maradona desde la perspectiva de uno de los jueces que intervendría en el mismo fue acercado a la productora por el señor Juan Manuel D’Emilio en febrero pasado”, expresó el productor.
“D’Emilio es un reconocido creativo publicitario, a quien respeto y conozco desde hace 20 años. La idea del contenido a realizarse, cuando fue presentado a la productora, ya se encontraba plasmada en un guión que fue entregado por D’Emilio”, explicó Ponti.
“Vidal Aleman, conforme también me lo hizo saber desde un principio el señor D’Emilio, era amiga desde la infancia de la jueza Makintach -cuya existencia también desconocía hasta aquel momento-, relación a partir de la cual se habría gestado la idea original”, indicó el productor acerca de los guionistas.
