Acasi seis años del asesinato de Fernando Báez Sosa, salieron a la luz conversaciones inéditas entre los ocho rugbiers imputados. En medio de cientos de mensajes, audios y videos, se pudo reconstruir cómo se relacionaban entre ellos, quién asumía el liderazgo del grupo y qué nivel de violencia manejaban en su dinámica cotidiana
En el controvertido chat de WhatsApp bautizado “Los desboca3” participaban Máximo Thomsen, Ciro y Luciano Pertossi, Enzo Comelli, Juan Pablo Guarino, Matías Benicelli, Blas Cinalli, Alejo Milanessi y Lucas Pertossi. Ayrton Viollaz no formaba parte debido a que no contaba con celular, y por un período también estuvo incluido un joven llamado Salvador.
En ese espacio, los jóvenes coordinaban los detalles de su viaje, aunque no sin tensiones: discutían por dinero, combustible y hasta por la presencia de mujeres. Pero, además, el chat dejó documentados los instantes previos y posteriores a la brutal agresión que sacudió a todo el país.
Acasi seis años del asesinato de Fernando Báez Sosa, salieron a la luz conversaciones inéditas entre los ocho rugbiers imputados. En medio de cientos de mensajes, audios y videos, se pudo reconstruir cómo se relacionaban entre ellos, quién asumía el liderazgo del grupo y qué nivel de violencia manejaban en su dinámica cotidiana.
La muerte de Fernando Báez Sosa puso a la violencia en manada en debate nacional. (Gentileza Clarín)
La carta que Fernando Báez Sosa escribió antes de que lo mataran los rugbiers en Villa Gesell: “En 10 años…”
En el controvertido chat de WhatsApp bautizado “Los desboca3” participaban Máximo Thomsen, Ciro y Luciano Pertossi, Enzo Comelli, Juan Pablo Guarino, Matías Benicelli, Blas Cinalli, Alejo Milanessi y Lucas Pertossi. Ayrton Viollaz no formaba parte debido a que no contaba con celular, y por un período también estuvo incluido un joven llamado Salvador.
En ese espacio, los jóvenes coordinaban los detalles de su viaje, aunque no sin tensiones: discutían por dinero, combustible y hasta por la presencia de mujeres. Pero, además, el chat dejó documentados los instantes previos y posteriores a la brutal agresión que sacudió a todo el país.
Se filtraron los chats de los rugbiers durante su estadía en Villa Gesell
Según el análisis realizado por TN, se revisaron cientos de archivos vinculados a la causa: 316 audios, 18 videos, 54 fotos, 733 páginas de chats y un total de 3.214 mensajes que los acusados intercambiaron tras el crimen del 18 de enero de 2020 en Villa Gesell.
El primero en confirmar su participación en el viaje fue Enzo Comelli, quien el 20 de noviembre de 2019 comunicó al grupo que había encontrado una casa para 10 personas, ubicada a menos de 200 metros del boliche Le Brique, el lugar en el que luego se desarrolló el ataque contra Báez Sosa.
Aunque Comelli fue quien cerró el acuerdo con la dueña del inmueble, Máximo Thomsen terminó asumiendo el liderazgo en la organización: definía cómo iban a viajar, cuánto debía aportar cada integrante, qué bebidas comprar y otros detalles logísticos. Incluso, el autor de la patada mortal les reclamaba a sus compañeros que aportaran $2.000 cada uno para la nafta, y ante las dudas de algunos, respondía de manera cada vez más agresiva.












