La delegada gremial Ayelén Monzón, representante de la UOM en la planta de Whirlpool en Fátima, todavía no asimila el golpe. Tras el anuncio del cierre definitivo de la fábrica y los 220 despidos, asegura que los trabajadores vivieron un martes “inexplicable”.

Artículo anteriorLa Provincia lanzó un sistema digital obligatorio para contratar obras públicas
Artículo siguienteAFA castigó a Estudiantes con 6 meses para Verón y suspensiones al plantel
Desde 2011 Corresponsal e informativista de @Continental590 | Press | #JusticiaParaCallejeros | Ya Tengo un Martin Fierro y ojalá que siempre sea rock

¿Qué te pareció la noticia?

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí