Con el objetivo de evitar aglomeraciones y frenar la propagación del coronavirus, el Gobierno nacional fijó una serie de reglas que deberán cumplir los supermercados, que incluyen la extensión del horario y lugares específicos de espera.
La resolución, publicada este lunes en el Boletín Oficial, tendrá vigencia durante 30 días, aunque podría prorrogarse en caso de ser necesario, y establece que los comercios “deberán implementar un horario de atención al público de al menos 13 horas diarias en función de los flujos de la demanda y a fin de evitar las concentraciones de los clientes”.
Además, los supermercados estarán obligados a “señalizar los lugares de espera, de manera de mantener una distancia de un metro y medio entre cliente y cliente sea tanto en línea de caja y/o donde los/as consumidores deban formar fila de espera”.
Para eso, la resolución añade que los locales tendrán que disponer de personal específico para controlar el acceso y evitar aglomeraciones.
Finalmente, el Gobierno ordenó “disponer banners, audios y materiales de prevención” al alcance de los clientes.
Cabe recordar que desde el domingo, los supermercados de todo el país ya habían anunciado que trabajarían entre las 7 de la mañana y las 20, en el marco de un acuerdo entre la Federación de Empleados de Comercio y Servicios y la Asociación de Supermercados Unidos. (DIB)