El vocero presidencial, Manuel Adorni, confirmó que el Gobierno decretará la emergencia ferroviaria, aunque negó que la medida esté vinculada al choque de la línea San Martín en Palermo, que dejó decenas de heridos.
“Se va a decretar la emergencia ferroviaria en línea con el informe que recibimos de la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT) en abril”, adelantó en su habitual conferencia de prensa.
“Tenemos una red ferroviaria devastada con la que nos encontramos con una deuda de US$100 millones. Se puso más énfasis en pintar un mural que en apostar al mantenimiento y al buen funcionamiento”, cuestionó.
Adorni desestimó además versiones que habían circulado sobre que el Gobierno le pediría la renuncia a algunos funcionarios por el choque. “No hay un solo cambio a evaluar, y el Gobierno no necesita ‘oxigenación’ de ninguna índole”, aseguró también en respuesta a declaraciones que realizó el senador Miguel Ángel Pichetto sobre cambios de Gabinete.
Cabe señalar que el viernes colisionaron dos trenes de la línea San Martín a la altura de Palermo, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, lo que dejó un saldo de 90 heridos. Desde el gremio La Fraternidad, que representa a los maquinistas, denunciaron que no funcionaba el sistema de señalización por el robo de cables y la falta de recursos para su reemplazo, al tiempo que advirtieron que la desinversión forma parte de un plan para privatizar los trenes y venderlos a bajo precio.
Además, en otro orden, el vocero defendió la creación del Régimen de Incentivos a las Grandes Inversiones (RIGI) que se debate en el Congreso, y apuntó a las críticas de la oposición que lo tildan de una medida que “fomenta el saqueo al país” y “ayuda a que los empresarios se lleven dinero al exterior”. “Significa más empleo, más empresas pagando impuestos en la Argentina y el desarrollo de una nueva cadena productiva”.