Con la negociación paritaria trabada luego de que las cámaras ofrecieran un 55% de aumento hasta noviembre y fuera rechazada por los gremios por considerarla insuficiente hoy las sucursales bancarias no atenderán al público ni en sucursal ni por teléfono aunque si se podrá operar normalmente por cajeros y homebanking.
Fuentes de la negociación aseguraron que el paro es político porque es el 55% va por encima de la inflación y que no se puede discutir en términos de futuro porque afectaría al contexto actual sin embargo desde la Asociación Bancaria consideraron que el ofrecimiento es insuficiente y ratificaron la medida de hoy.
El País