TRAGEDIA DE ONCE
El abogado, Gregorio Dalbón, aseguró que “más que una sorpresa es un alivio” que el maquinista que conducía el tren que protagonizó la denominada Tragedia de Once haya admitido que accionó el sistema automático de frenos de la formación.
En declaraciones a No Corras por FM 97 Une, el abogado querellante en esa causa indicó que “a mí no me sorprende porque es lo que sostuve en soledad durante muchos años. Técnicamente siempre dije que el tema del estrago era un problema del motorman y la administración fraudulenta era una cuestión de los funcionarios y los concesionarios”.
Sostuvo que “no se le puede cargar las muertes a los funcionarios y a los concesionarios porque la maniobra de desconectar el freno de hombre muerto fue temeraria” y agregó que “lo que hizo el maquinista no tiene explicación porque además arriesgó su propia vida”.
Dalbón destacó que “ahora cómo se le explica a la sociedad que la causa venia podrida por (el ex juez) Bonadío que con la instrucción del juicio hizo un desastre, politizó la causa y utilizó a las víctimas” y enfatizó que “todo lo que se generó tiene tintes mafiosos”.
Añadió que “las familias saben todo, les dije que había sucedido lo que siempre afirmé y que quien mató a sus hijos fue el maquinista” y agregó que “quienes cometieron ilícitos respecto de lo económico fueron las empresas y los funcionarios y por eso están demandados civilmente”.
Finalmente, Dalbón sostuvo que “la gente que participó en el desvío de fondos debe cumplir su pena condenados por administración fraudulenta. Tienen que estar tranquilos, no mataron a nadie; pero son chorros”.
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