Con barbijo todo el tiempo y solo dos veces por semana. Así será, en principio, la vuelta a las clases presenciales en la provincia de Buenos Aires, que comenzarán el 17 de febrero para los estudiantes que tuvieron más dificultades el año pasado, y el 1° de marzo para el resto.
Tras el aval del Gobierno nacional, que dejó la decisión en manos de las provincias, Buenos Aires intensificó la tarea de organizar el retorno a la presencialidad. Lo hizo en medio de las presiones de la oposición por la vuelta a las aulas, y el rechazo de los gremios nacionales.
Según señalaron a DIB fuentes del Ejecutivo bonaerense, una de las principales características que tendrá la vuelta a las aulas será su intermitencia: al no poder garantizarse el distanciamiento adecuado en la mayoría de las aulas se implementará un sistema mixto, que combinará dos días de clases presenciales con dos días virtuales, y un quinto día para hacer un seguimiento de la virtualidad.
Esta proporción, no obstante, variará según la matrícula: en aquellas instituciones con menos estudiantes (como las escuelas rurales con pluriaño) las clases presenciales podrán tener lugar de lunes a viernes, mientras que en otras se implementarán los esquemas duales o híbridos que combinen las actividades presenciales y no presenciales.
También se prevé la organización de los ingresos y egresos de la escuela en forma escalonada, para evitar la concentración de personas en el ingreso y la salida.
El gobernador Axel Kicillof repitió este miércoles que la intención de su Gobierno es volver “a una presencialidad combinada con virtualidad, en grupos chicos y en turnos para cuidar a los alumnos, a las familias y a los docentes”.
“Lo que estamos pensando, como está ocurriendo en varios países, es volver a la presencialidad, llamémosla especial, porque hay que dividir los grupos. En un aula donde antes cabían 30 chicos, ahora si ponen 30 chicos se corren riesgos. Entonces, probablemente se hagan turnos y hasta se modifiquen los días de asistencia”, adelantó.
Protocolos
A priori, en el Gobierno confirmaron dos fechas de regreso, aunque todo dependerá de la situación epidemiológica del momento. El 17 de febrero -misma fecha que tiene prevista el Gobierno porteño para todo el sistema- se iniciarán actividades de “intensificación de contenidos curriculares” para aquellos estudiantes que presentaron dificultades durante el año pasado, ya sea por problemas de conexión como de apropiación de contenidos.
El 1° de marzo, en tanto, la intención es que todo el sistema educativo retorne a las aulas con el sistema de alternancias que se está pensando.