Un nene de 4 años murió ahogado en una pileta el pasado fin de semana, en un hecho que causa conmoción en todo Berazategui.
El trágico hecho generó un profundo dolor en la comunidad educativa del Jardín Santa Teresa de Ávila, en la localidad de Juan María Gutiérrez, adonde el pequeño, Lautaro, concurría.
Ante esa situación, el obispo Carlos José Tissera y la Vicaría de Educación de la Diócesis de Quilmes, así como también las autoridades del Jardín, expresaron su dolor por el fallecimiento del niño en un accidente doméstico.
En ese sentido, el Obispo y los representantes de la Vicaría “desean estar cerca de su familia e invitan a la Diócesis de Quilmes a rezar para que el Buen Padre reciba en sus brazos a su hijo, y dé consuelo y fortaleza a su familia y seres queridos en este momento especial».