La labor de los peritos forenses permitió confirmar que se trató de un hecho de violencia dado que quien era Héctor Vila, de 77 años, presentaba un importante golpe en la cabeza, así como también algunas lesiones cortantes.
Los profesionales estiman que el fallecimiento ocurrió a últimas horas del domingo, por lo que la causa cambió de fiscal. Si bien había tomado el caso Romina Díaz, que entró en turno este lunes, en función del informe de necropsia se decidió que la investigación la continúe Alejandro Pellegrinelli, que estuvo en turno durante la semana anterior.
En la pesquisa se trabaja sobre el relevamiento de muestras logradas en la escena del crimen en procura de algún dato que permita determinar quién o quienes fueron responsables de este crimen.
Vecinos aseguran que no escucharon ruidos extraños ni situaciones que llamaran la atención. De hecho, encontraron el cadáver de “Tito”, como lo conocían los más cercanos, cuando asomaron a la vivienda que habitaba, preocupados porque no lo habían visto.
Se pudo conocer de fuentes judiciales que el golpe que presentaba en el cráneo era importante, supuestamente producido por un elemento contundente, como podría ser un martillo, maza o similar.
No está determinado aún algún faltante dentro de esa vivienda, que pudiera orientar la investigación hacia la hipótesis del homicidio en ocasión de robo. Y por eso no se descarta que pudiera haber otra motivación, por alguna deuda o ajuste de cuentas, entre las hipótesis que barajaban tanto en sedes judicial y policial donde se trabaja en este caso.
Este es el segundo crimen que se comete en el distrito en poco más de 72 horas. El anterior había ocurrido el jueves por la tarde, en Batán, donde tres encapuchados ingresaron con fines de robo a la casa del dueño de un horno de ladrillos y le aplicaron una puñalada mortal cuando intentó resistirse.