El jefe de Gabinete bonaerense, Carlos Bianco, salió al cruce este martes del intendente de Capitán Sarmiento, Javier Iguacel, y dijo que cometió un “delito grave” al llamar a cortar las rutas para exigir la presencialidad escolar en los municipios del interior, al tiempo que apuntó contra el Procurador General de la Corte, Julio Conte Grand.
“El intendente de General Sarmiento, Javier Iguacel, dijo que si el gobernador no lo deja dar clases presenciales iba a cortar rutas. Le quiero decir a Iguacel que es un delito grave”, señaló Bianco.
“Me parece grave, institucionalmente grave. Cortar rutas es un delito federal, no sé si estaba al tanto el señor Iguacel. Lo extraño, más allá de lo grave, es que un intendente esté instigando a que se cometa un delito y no haya ningún fiscal general que haya actuado de oficio, denunciándolo por apología del delito”, dijo el funcionario.
Y en ese sentido, apuntó contra el Procurador de la Corte, Julio Conte Grand: “Me resulta particularmente extraño o no, teniendo en cuenta que titular del Ministerio Público Fiscal y Javier Iguacel forman parte del mismo espacio político”.
El jefe de los ministros le recomendó al actual intendente y exministro de Energía durante el Gobierno de Mauricio Macri que “en lugar de instigar a que se cometan delitos, dedique su tiempo a hacer cumplir los protocolos, y así seguramente va a pasar a fase 3 y va a volver a la presencialidad”.
Asimismo, recordó que tuvo que comunicarse en varias ocasiones a partir de denuncias por incumplimientos de las medidas de cuidado en su municipio.
Iguacel es uno de los intendentes opositores que en las últimas horas reclamó por el retorno de la presencialidad escolar en distritos del interior en fase 2.
Respecto a la queja de los jefes comunales de Juntos por el Cambio, Bianco negó “discriminación” y se refirió al indicador de incidencia que determina en qué fase está cada municipio: “La respuesta es muy fácil y muy sencilla, la incidencia de casos es mayor de 500 por cada 100 mil habitantes, en los últimos 14 días. No discriminamos a nadie, lo explicamos muchas veces y sigue funcionando de la misma manera”, dijo. Y volvió a referirse a “la analogía de la mancha de aceite, cuando los contagios se van extendiendo al interior y se reducen en el AMBA, que es lo que pasa ahora”.
“No hicimos un cálculo elástico, sino rígido. Está escrito perfectamente. Más claro, echarle agua. Mandé a los periodistas que lo cuestionaron a leer la normativa y dice que los casos deben registrarse el día de inicio de síntomas. No entiendo cuál es la polémica”, amplió.
“Primero se quejaban de que no había clases presenciales en algunos distritos, ahora de que la situación epidemiológica lo permite en algunos distritos en base a la incidencia de casos y no a cálculos electorales, y se quejan de eso”, finalizó. (DIB)