El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, inauguró el período de sesiones ordinarias de la Legislatura bonaerense con un discurso fuertemente centrado en las acciones de su Gobierno para mitigar los efectos de la pandemia del coronavirus, volvió a cuestionar a su antecesora María Eugenia Vidal y a reclamar recursos de coparticipación, y anunció una serie de medidas para lo que consideró la “reactivación de la pospandemia”.
El mandatario provincial dedicó la mitad de su discurso de casi dos horas para hablar sobre las acciones de su Gobierno durante la pandemia, dejando traslucir -como en otras ocasiones- críticas a Vidal .
“Estaban todas las condiciones dadas para que el virus desbordara en la provincia: un sistema de salud diezmado, una alta concentración de la población, déficit habitacional, una crisis económica y social heredada. Esto hizo que muchos se preguntaran: ¿cuándo explota la Provincia? ¿Cuándo explota el Conurbano?”, se preguntó el mandatario.
“Reactivación” y tarifas
En la segunda parte de su discurso, Kicillof anunció la puesta en marcha de un “plan de reactivación para la pospandemia” en la provincia de Buenos Aires, que incluye inversiones en obras públicas, financiamiento para la inversión productiva, una moratoria de impuestos patrimoniales y cambios en el monotributo.
“Vamos a fomentar el crecimiento de la demanda, el crecimiento sostenido del salario real, sin eso no hay mercado, no hay producción”, dijo Kicillof a los legisladores, al tiempo que sostuvo que “hay que trabajar simultáneamente con todos los sectores, pero sobre todo con lo más golpeados por la pandemia.
En ese marco, el Gobernador anunció que acompañará en la Provincia la decisión del presidente Alberto Fernández de desdolarizar las tarifas de los servicios públicos: “No puede ser que sean pagadas en dólares”, remarcó, al tiempo que enumeró los incrementos de tarifas durante la gestión anterior y la decisión de Vidal de aplicar un incremento de la tarifa de luz en enero de 2020, fecha en la que ya no estaría en el poder.
Sobre su plan de desarrollo, Kicillof detalló que enviará a la Legislatura un proyecto de ley de Fortalecimiento Productivo, que incluye una moratoria general de impuestos patrimoniales por deudas generadas durante la pandemia y otra para los agentes de retención de Ingresos Brutos que no ingresaron fondos retenidos de los contribuyentes.
Por otro lado, también anunció la remisión de un proyecto para unificar el monotributo. De esta manera, “se va a pagar una cuota fija mensual según la categoría de monotributo sin presentar declaraciones juradas y sin la aplicación de retenciones”.
Y adelantó la implementación de un “programa de financiamiento para la inversión productiva”, que incluye algunas herramientas crediticias del Banco Provincia que ya se aplican y otras que se lanzarán próximamente. También prometió la implementación del programa “Comprar más cerca”, una suerte de “Precios Cuidados” provincial, que consistirá en el establecimiento de una canasta de productos provincial para pequeños comercios, mercados y supermercados de cercanía, que “se quedaron afuera del programa nacional que se lanzó”.
Más recursos
Kicillof insistió en reclamar una mejora en el reparto de recursos coparticipables de la Provincia de Buenos Aires, y aseguró que hay un “Estado pobre” por una distribución “injusta”.
“Nuestra provincia es la más rica, pero también la más desigual: la riqueza está muy injustamente distribuida”, señaló el mandatario al comienzo de su alocución. Y agregó que “la reconstrucción del Estado provincial requirió desandar una historia de injusticia vinculada a la enorme diferencia entre lo que nuestra provincia aporta de recursos y lo que recibe”.
“Tenemos la firme decisión de recuperar los recursos que le corresponden a la provincia y hoy contamos con un Presidente que tiene la vocación federal de comprometerse y generar una distribución menos injusta y desigual de los recursos”, señaló el mandatario.
“La pandemia modificó el mapa del delito”
En otro orden, el Gobernador aseguró que la pandemia “modificó el mapa del delito” y sostuvo que, si bien hubo una baja de los hechos prevenibles, crecieron los ilícitos no prevenibles, que incluyen las violencias de género.
“La pandemia modificó el mapa del delito y la forma del delito. El delito prevenible, en promedio mensual, se redujo de 22 mil a 14 mil en el último semestre de 2020 con respecto a similar período del 2019, pero los delitos no prevenibles, que incluyen la violencia familiar y las violencias de género, crecieron de 20 a 30 mil, en similar período”, precisó el mandatario bonaerense.