La Defensoría del Pueblo bonaerense se encuentra presente en el desarrollo del nuevo juicio por el asesinato de Natalia Melmann, y reclamó que las pruebas presentadas en el juicio sean valoradas bajo la perspectiva de género, lo que sentaría un precedente en la Justicia para este tipo de casos.
El organismo que conduce Guido Lorenzino se encuentra representado en las audiencias por el delegado en Mar del Plata, Eduardo Carnicero. Además, el Observatorio de Políticas Públicas de Género de la Defensoría acompaña a la familia de la joven asesinada en 2001, como lo hizo con su reclamo contra el pedido de libertad condicional realizado por los condenados por el crimen en el juicio anterior.
La postura de la Defensoría va en consonancia con el pedido de la fiscalía, que reclamó que a pesar de que la figura de femicidio no existía como agravante al momento del hecho, la prueba presentada en este juicio y durante la investigación sea valorada a través del prisma de la perspectiva de género.
“Esto puede constituir un precedente en materia de justicia para las mujeres y niñas víctimas de femicidios en contexto de violencia de género, más aun teniendo en cuenta la gravedad institucional que implica que los autores sean efectivos de las fuerzas de seguridad al momento del hecho”, expresaron desde el Observatorio.
El nuevo juicio es contra Ricardo Panadero, el exsargento de la Policía Bonaerense que fue el cuarto efectivo acusado por el crimen de la adolescente ocurrido en Miramar, pero que en el juicio realizado en 2018 fue absuelto por no acreditarse su coautoría en los hechos. Sin embargo, por un pedido de la Fiscalía General marplatense, se lo juzga de nuevo al considerar que existió una apreciación incorrecta de las pruebas y se prescindieron de elementos relevantes.
“Desde la Defensoría seguiremos acompañando a las familias que de manera inquebrantable luchan para alcanzar la idea de justicia y subsanar de algún modo el daño irreparable que implica la pérdida a manos de femicidas”, expreso Lorenzino.
