El gobernador Axel Kicillof volvió a apuntar hoy contra los medios de prensa y dijo estar “azorado” por el tratamiento que realizan sobre la negociación que la Provincia lleva adelante con los bonistas por la deuda bonaerense. Ocurrió en una jornada atravesada por fuertes rumores respecto de nuevas exigencias de los acreedores.
“Sigo leyendo, azorado, el tratamiento que da parte de la prensa al diálogo en curso con los bonistas de la Provincia de Buenos Aires. Acorralado parece ser un adjetivo estrafalario para describir esta instancia de la negociación”, escribió Kicillof en su cuenta de Twitter al citar una nota del portal Ámbito Financiero en la que se definía como “acorralado” por los bonistas al mandatario.
A 48 horas de que expire el plazo extendido para que los bonistas comunique si aceptan o no la propuesta para postergar el vencimiento del capital del bono BP21, por USD 250 millones, ese artículo hacía referencia a la oferta de pagar por adelantado el total de los intereses de ese papel y no solo los que vencen ahora, que Kicillof había lanzado unas horas antes.
El fin de semana, se había conocido, también a través de un medio de prensa, el bisemanario Perfil, una propuesta de un fondo de inversión para otorgar a la provincia un crédito puente que evite caer en un default si no se acuerda con los bonistas, que sería otorgado por un conjunto de bancos privados. Hoy, circuló en los mercados otro rumor: que los acreedores pedirían un nuevo “gesto” de Kicillof.
Esa segunda propuesta consistiría en que la provincia pague solo una parte del capital que venció el 26 de este mes y que en el gobierno de Kicillof quieren prorrogar para el 1 de mayo. El objetivo, explican los acreedores, es “mantener la curva actual de los bonos” y que no se derrumbe el valor de los títulos, tal como ocurrió en las últimas jornadas en medio de la incertidumbre.
En el gobierno dijeron a DIB que hay varias variantes que están siendo analizadas, pero a la vez advirtieron por la “muchas operaciones” en torno a esta cuestión. A la vez confirmaron que, tal como había contado DIB, el gobierno provincial no descarta pagar el capital ?o parte de él- si no se llega a un acuerdo, en línea con la intención de evitar un default provincial.