El fuerte temporal que se desató entre el lunes y el martes provocó graves daños en distintas localidades bonaerenses, especialmente en Bolívar, Daireaux y Urdampilleta. Las precipitaciones superaron los 110 milímetros en pocas horas y estuvieron acompañadas por ráfagas intensas y caída de granizo.
CINCO MILLONES DE HECTÁREAS AFECTADAS Y CAMPOS INUNDADOS
Desde el sector agropecuario estiman que las lluvias afectaron cerca de cinco millones de hectáreas en el centro y oeste de la provincia. El agua cubrió lotes productivos, complicó la siembra de soja y maíz, y redujo drásticamente la superficie disponible para la hacienda.
A esto se suma la dificultad para mover maquinaria, trasladar insumos o sacar la producción, ya que los caminos rurales colapsaron bajo el exceso hídrico.













